La semana laboral de 4 horas: el sueño de cualquier freelance

Uno de los libros que más cosas útiles me han enseñado en mi carrera como redactor freelance es «La semana laboral de 4 horas» de Timothy Ferriss. Básicamente, explica cómo ganar más dinero trabajando menos (algo que a todos los freelancers nos gustaría). Lo hace mediante consejos para administrar mejor tu tiempo, automatizar tu negocio online o delegar tareas en ayudantes virtuales. ¿Te cuento lo que he aprendido de este libro que te puede ser útil en tu trabajo de freelance?

«La semana laboral de 4 horas» fue publicado en 2007 por Timothy Ferriss y es uno de los primeros libros de autoayuda que tratan sobre el concepto de los «ingresos pasivos», en los que posteriormente han profundizado otros autores como el conocido gurú Franck Scipion. Me lo regaló un buen amigo hace años, pero sigo releyéndolo de vez en cuando y aprendiendo cosas.

Su autor es Timothy Ferriss, un emprendedor que asegura que pasó de trabajar 80 horas a la semana para ganar 40.000 dólares al año, a trabajar 4 horas a la semana y ganar 40.000 dólares al mes, vendiendo suplementos de nutrición deportiva en Internet. Aparte de eso, asegura que habla seis idiomas, ha sido campeón de kickboxing en China, batió un récord mundial bailando el tango y se convirtió en una estrella televisiva en Hong Kong.

En este vídeo resume cómo ha logrado hacer todo esto en una sola vida:

Lógicamente, no es tan fácil: pocos negocios existen en el mundo que den tanto dinero con tan poca dedicación, e intuyo que como todos los gurús, Timothy Ferriss «adorna» un poco la historia para que compremos su libro. Sin embargo, sus consejos sí me parecen útiles para aplicarlos al trabajo de los freelance. Te resumo las ideas que más me impactaron del libro.

No debes tener miedo a dar el salto

Antes de convertirme en redactor freelance, estuve diez años trabajando para otras empresas. Y no era feliz: tenía que hacer muchas tareas que no me gustaban aparte de escribir, aguantar a jefes mediocres, cobraba menos de lo que merecía… ¿Te suena? Ya en mi primer trabajo, quedé deslumbrado al descubrir que había un tipo al que llamaban «el freelance» y que trabajaba en casa, venía a la oficina solo cuando le encargaban artículos y cobraba mucho más que yo.

Entonces decidí que quería trabajar como freelance. Pero tardé casi diez años en dar el salto. ¿Por qué?

A causa del miedo: miedo a fracasar, a quedarme sin trabajo, a no poder pagar el alquiler, a que mi familia y amigos me recriminaran mi «estúpida idea». Pero este tipo de miedo es un freno que nos paraliza y nos impide alcanzar las metas que más deseamos en la vida.

En «La semana laboral de 4 horas», Timothy Ferriss explica cómo superar este miedo haciéndote preguntas como estas:

  • ¿Qué es lo peor que podría pasar si hicieras lo que estás pensando?
  • ¿Qué puedes hacer para evitar que eso suceda, o reducir los daños?
  • ¿Qué es lo más probable que ocurra en realidad? (no lo peor)
  • Si te despidiesen de tu trabajo y no encontraras otro, ¿qué harías para ganarte la vida?
  • ¿Cuánto te está costando, a nivel económico y emocional, no hacer lo que te gustaría?

Me hice estas y otras preguntas y descubrí que, en realidad, me daba más miedo pasarme el resto de mi vida haciendo algo que no me gusta, que arriesgarme y probar como freelance aunque fracasara.

¿Quieres ser el gordo calvo del descapotable rojo?

el gordo del descapotable rojo

Imaginemos que te va bien trabajando para otros, aunque no te guste lo que haces. Te esfuerzas, te ganas la confianza de tus jefes, asciendes, empiezas a ganar dinero y la vida te sonríe. Aunque odies profundamente tu trabajo, o simplemente no te llene. ¿Qué ocurrirá?

Puedes convertirte en lo que Timothy Ferriss llama «el tipo gordo del descapotable rojo»: un profesional que ha destacado en su trabajo, tiene un puesto importante y gana suficiente dinero como para comprarte un descapotable rojo y ser la envidia de todos. Por el camino, se ha dejado la salud y la mayor parte del pelo, pero es un triunfador. La pregunta es: ¿serías feliz trabajando toda tu vida en algo que no te llena lo suficiente, aunque te dé mucho dinero?

Yo no. Siempre he querido ganarme la vida escribiendo. Y eso es lo que hago ahora. Tal vez no me llegue nunca para comprarme un descapotable rojo, pero soy feliz con mi vida. ¿Y tú?

El 80 % de las cosas no importa absolutamente nada

En «La semana laboral de 4 horas» aprendí otro concepto que tiene multitud de aplicaciones en la vida. Se trata de la regla de Pareto o principio del 80/20. La creó un matemático italiano en el siglo XIX para demostrar que el 80 % de la riqueza estaba en manos del 20 % de la población.

Sin embargo, esta proporción se puede aplicar a otros muchos aspectos del trabajo freelance:

  • El 80 % de tus ganancias procede del 20 % de tus clientes. ¡Cuídalos!
  • El 80 % de tus visitas, contactos, etc. procede del 20 % de tus acciones de marketing.
  • El 20 % de las tareas que haces generan el 80 % de tus ingresos. ¡Olvida el resto!

Y podría seguir así un buen rato. La conclusión es que no todas las tareas que hacemos son igual de urgentes e importantes, y algunas importan tan poco que podemos dejar de hacerlas. 

«Si te pusieran una pistola en la sien y tuvieses que dejar de hacer 4 de cada 5 actividades que ocupan tu jornada, ¿cuáles eliminarías?» Timothy Ferriss

Así es como Timothy Ferriss logró reducir su jornada laboral a solo cuatro horas por semana. Yo no he llegado tan lejos, pero la regla del 80/20 sí me ha servido para priorizarme mejor.

Tu tiempo vale dinero. ¿Por qué lo malgastas?

La ocasión en la que más he trabajado en mi vida fue durante mi breve paso por un periódico local que nació con mucha ambición y murió pocos meses después. Lo recuerdo con cariño porque fue la primera empresa con la que firmé un contrato de verdad con un sueldo digno.

El cierre del primer número nos pilló con todo a medio hacer. Empezamos a cerrar la edición un jueves por la tarde y acabamos el viernes a mediodía. En total, estuve más de 20 horas seguidas en la oficina, la mayor parte de ellas dedicadas a esperar que el único maquetador que teníamos empezara a paginar mis textos. Fue una bonita experiencia, pero una gran pérdida de tiempo.

ladrones del tiempo

Volviendo a la regla anterior, me atrevería a decir que malgastamos el 80 % de la jornada laboral y solo nos queda un 20 % del tiempo para trabajar. Timothy Ferriss explica que hay tres responsables de ello:

  • Ladrones de tiempo: tareas que tequitan tiempo y no aportan nada, como la inmensa mayoría de las reuniones, llamadas telefónicas, videoconferencias y otras interrupciones.
  • Consumidores de tiempo: son tareas que si aportan algo, pero tequitan mucho tiempo. Por ejemplo: leer y responder correos electrónicos, hacer presupuestos, preparar facturas, etc.
  • Falta de planificación: nunca debes empezar tu jornada laboral sin dedicar unos minutos a planificar las tareas y repartir el tiempo. De lo contrario, el 20 % inicial de las tareas acabará consumiendo el 80 % de tu tiempo.

El remedio contra los ladrones del tiempo lo tengo claro: desde hace años, no voy a visitar a clientes, no atiendo llamadas telefónicas de trabajo y no hago videoconferencias a menos que sea imprescindible. También he explicado a mi familia y amigos que, aunque trabaje en casa, tengo una jornada laboral y durante ella no puedo atender asuntos personales que no sean importantes.

En cuanto a los consumidores de tiempo, hace tiempo que desactivé las notificaciones de mensajes entrantes y solo consulto el correo por la mañana, antes o después de comer y a última hora de la tarde. Además, he creado plantillas y he buscado herramientas para automatizar la elaboración de presupuestos y facturas, como las que puedes ver aquí.

Finalmente, cada día elaboro una lista de las tareas que voy a hacer en cada franja horaria (de 9 a 10, de 10 a 11, etc.) Y cuando termina una hora, paso a la siguiente tarea. Así consigo avanzar en varios frentes cada día.

¿Radical? Desde luego, pero con estas medidas he logrado dedicar el 80 % de mi jornada a trabajar, es decir, escribir.

Delega lo que otros pueden hacer para dedicarte a lo que solo tú puedes hacer

Otra cosa que aprendí en «La semana laboral de 4 horas» y que me ha costado mucho poner en práctica es delegar.

Confieso que soy un mal jugador de equipo: siempre intento hacer todo por mí mismo porque me cuesta confiar en los demás. Sin embargo, con el tiempo aprendí que delegar es fantástico, porque me hace ganar un tiempo que puedo dedicar a lo que me gusta: escribir.

Timothy Ferriss explica cómo contrató a asistentes virtuales en India que le gestionan la agenda, pedidos, facturas, etc. Él se limita a relajarse y responder algún e-mail de vez en cuando:

«Cuando enciendo el ordenador, veo la bandeja de entrada llena de mensajes de mis ayudantes extranjeros. Es una sensación extraña tener gente trabajando para ti mientras duermes. Extraña pero estupenda.» Timothy Ferriss

Yo no he llegado a tanto, pero he aprendido a delegar: tengo una administrativa que se ocupa de las facturas, impuestos y papeleo; una diseñadora a la que recurro cuando necesito temas gráficos; varios traductores para las tareas en otros idiomas; etc. Lo mejor es que todos mis colaboradores son freelance, así que solo les pago cuando trabajan para mí. Y les puedo pagar porque tengo más tiempo para escribir y ganar dinero.

La última lección: el estrés no siempre es malo

En mi vida he tenido mucho estrés (sobre todo cuando trabajaba para otros) y lo odio. Siempre he pensado que una vida sin estrés sería mejor. Sin embargo, resulta que me equivocaba: el estrés no siempre es malo. Mejor dicho: existe un estrés «bueno» y un estrés «malo».

El estrés «malo» se llama «distrés» y es el que sufres cuando tienes que hacer mucho trabajo en poco tiempo, sientes que no llegas, los clientes te presionan, cometes errores… Te angustia, te debilita y acaba pasando factura a tu salud. Ese tipo de estrés negativo hay que evitarlo con una buena planificación y poniendo límites en tu trabajo y en las exigencias de tus clientes.

el estres bueno y el estres malo

El estrés «bueno» se llama «eustrés» y es el que sientes cuando estás haciendo algo que te gusta y te motiva porque supone un reto. Entonces no te preocupa dedicarle muchas horas, esforzarte al máximo y repasar el trabajo una y otra vez. Este estrés es positivo porque te impulsa a hacer más, a superarte y llegar más lejos porque crees en lo que estás haciendo.

¡He descubierto que me encanta el «eustrés» porque me hace ser un mejor freelance!

Ahórrate un montón de gurús de Internet

El resto del libro «La semana laboral de 4 horas» está dedicado a explicar cómo crear un negocio y generar ingresos pasivos (sin mover un dedo) gracias a Internet.

Son ideas que no sé si inventó Timothy Ferriss, pero que luego he visto repetidas hasta la saciedad en infinidad de blogs de presuntos gurús de la Red: buscar un micronicho, convertirte en un experto, vender infoproductos y automatizarlo todo (marketing, descargas, facturas, etc.) para crear una «máquina» de ganar dinero que te haga millonario trabajando cuatro horas a la semana.

Sinceramente, esa parte es la que menos me interesa del libro por dos motivos. En primer lugar, porque creo que el mundo está lleno de «fantasmas» que alardean de hacerse ricos sin trabajar, pero todos quieren que les compres algo; y porque a mí me gusta mi trabajo, que es escribir, y no me importa dedicarle unas horas cada día siempre que disfrute con ello 🙂

Si quieres saber más, puedes leer este libro en papel o e-book pulsando en este enlace.

¿Qué otros libros o gurús te han inspirado? ¡Compártelos!

Comentarios

  • Redactor Freelance
    23 septiembre 2016 at 16:06

    Me alegro que te haya gustado el artículo, Noelia. Para mí este libro fue una revelación.

    Lo de dejar el trabajo antes es mi gran asignatura pendiente, pero he avanzado bastante en no trabajar los fines de semana (bueno, algunos) y ser más expeditivo con los ladrones de tiempo. Incluso he quitado mi teléfono de la web porque me resulta más eficiente gestionar las consultas y solicitudes de los clientes por e-mail.

    En cuanto a los gurús del ganar dinero sin mover un dedo… Lo que veo es que cuando te suscribes a su página se pasan el día enviando mensajes para que compres algo… Entonces no debe ser tan fácil y automático como dicen!!!

    ¡Ánimo y a seguir aumentando los ingresos! No se trata de trabajar más, sino de trabajar mejor.

    Saludos,

    Roger

  • Anónimo
    23 septiembre 2016 at 15:29

    Me ha gustado mucho este post Roger. Ha sido muy instructivo y reconfortante. Sobre todo al darme cuenta que algunas hay cosas que ya las estoy aplicando. He tenido que pasar por el proceso de hacerlas mal, pero me he dado cuenta que en dos años trabajando como freelance he avanzado en efectividad y planning. Lo de planificar las horas yo también lo hago desde hace tiempo. En esta nueva etapa después de verano, me estoy planeando para levantarme antes e irme antes a la cama y dejar la oficina a las 5.30 como mucho (salvo excepciones) para tener tiempo para otras cosas todas las tardes. Y la verdad que me siento mucho más productiva. Además estoy de acuerdo contigo en eso de que no te interese lo de hacerte rico sin mover un dedo. Yo siempre pienso… si fuera tan fácil o tan factible, todos seriamos ricos… y además también me gusta lo que hago. Ahora solo queda que este año aumente mis ingresos para que no sea una odisea pagar las facturas…. Un abrazo y muchas gracias de nuevo por todos tus consejos. Noelia

  • Redactor Freelance
    16 mayo 2016 at 07:34

    Hola Luis:

    el libro está bien pero no se centra específicamente en la gestión del tiempo, sino que aborda muchos otros aspectos. Posiblemente lo más relevante en cuanto a organización (priorizar, eliminar tareas innecesarias, 80/20, ladrones del tiempo, etc.) ya lo esbozo en mi post.

    Te recomendaría buscar otros libros o lecturas más específicas centradas en la gestión del tiempo si es eso lo que te interesa. El libro de Tim lo veo más enfocado a aquellos que se están planteando emprender o empezar a trabajar por su cuenta y necesitan dar el salto.

    Un abrazo,

    Roger

  • Anónimo
    14 mayo 2016 at 10:04

    Hola, Roger.

    Llevo años siguiendo tu blog desde que se me pasó por la cabeza montar mi propio negocio de redacción. Por suerte o por desgracia, no prosperó, pero llevo dos años escribiendo ficción como escritor autopublicado y estoy muy satisfecho con los resultados. Por eso cada día pienso en dejar mi trabajo actual como empleado por cuenta ajena para escribir y viajar por el mundo. Si todo va como espero, es posible que lo lleve a cabo el año próximo.

    El tema que más me preocupa es la gestión del tiempo. A la hora de escribir es sencillo establecer metas: un capítulo por la mañana o 2.000 palabras en dos horas. Pero me cuesta concretar cuando me dedico a profundizar en temas de marketing, ya que no establezco objetivos. En resumen, temo que mi productividad continúe siendo la misma, a pesar de disponer de más tiempo. Voy a considerar la regla de establecer las tareas antes de empezar la jornada, quizá eso me ayude. ¿Me recomiendas leer el libro en cuestión o con el resumen de tu post es suficiente?

    Un cordial saludo,

    Luis

  • Redactor Freelance
    2 mayo 2016 at 07:31

    Hola Mary:

    ¡pues adelante!

    No hay peor condena que ser infeliz con tu trabajo el resto de tu vida.

    Recuerda que puedes apuntarte gratis al Directorio de Redactores en Venezuela para ofrecer tus servicios y buscar clientes: redactorfreelance.com/p/redactores-venezuela.html

    Te deseo mucha suerte, pero en realidad lo importante es el esfuerzo 😉

    Un abrazo,

    Roger

  • mary
    1 mayo 2016 at 21:02

    Hola Roger García, me encantó tu post. Da justo en el clavo de mi vida. Trabajo como periodista para un periodico local de una provincia en Venezuela, acabo de tener a mi segunda hija. Decidí renunciar porque me cansé de ese trabajo que no le aporta nada a mi perfil profesional, son siete años haciendo lo mismo. Saber que tu lo hiciste, me anima más a renunciar sin ningún titubeo. Quiero ser mi propio jefe y escribir, eso me hace muy feliz.

  • Redactor Freelance
    25 abril 2016 at 08:24

    Hola:

    Te felicito por estar iniciando esta aventura profesional.

    En el siguiente enlace puedes ver una recopilación de los artículos más interesantes para iniciarte como redactor freelance:

    redactorfreelance.com/2014/11/quieres-trabajar-de-redactor-freelance.html

    Espero que te sean útiles.

    Saludos,

    Roger

  • Redactor Freelance
    25 abril 2016 at 08:23

    Hola María Angélica:

    Gracias a ti por tu amable mensaje y me alegro mucho de que el Directorio te haya servido para encontrar un nuevo cliente.

    Aquí me tienes para cualquier cosa que necesites.

    Saludos,

    Roger

  • Unknown
    23 abril 2016 at 17:53

    Gracias, Roger, por el interesante artículo. Aprovecho de agradecerte porque gracias a que aparezco en la lista de redactores freelance de tu blog, conseguí un nuevo cliente. ¡Felicitaciones y continúa el buen trabajo!

  • Unknown
    23 abril 2016 at 17:50

    Gracias, Roger, por el interesante artículo. Aprovecho también de agradecerte por haber conseguido un cliente nuevo a través de la lista de redactores de tu blog. ¡Felicitaciones y continúa el buen trabajo! María Angélica Brunell Solar

  • Anónimo
    22 abril 2016 at 19:50

    Yo me estoy inciando en este proyecto de redactor freelance y estoy en la etapa de preparación e investigación. Y estoy encantada y agradecida con toda la información que aportas en este blog.

  • Redactor Freelance
    22 abril 2016 at 07:41

    ¡Gracias a ti por seguirme!

    Es un gusto compartir lo que voy aprendiendo con lectores como vosotros.

    Un abrazo desde España (con 6 horas de diferencia 🙂

  • Andrés Alcázar
    21 abril 2016 at 18:17

    Si, es cierto, no es fácil… yo de plano por eso por lo menos en Nubelo.com no volví a postularme, como hay que pagar eso no aguanta.

    Y Roger tenés razón… a veces es irrisorio lo que ofrecen. Como llevo poco al principio me tocó casi regalarme pero a hoy, me invitan a un proyecto y pongo las condiciones, tratan de regatearme pero les digo que no mostrándoles algunas de mis Skills jejeej y por lo menos mi última oferta que hice no estuvo tan mal, logré pactar lo que quería.

    Mientras tenga mi propio blog toca con paciencia ir seleccionando qué acepta uno o no.

    slds

  • Andrés Alcázar
    21 abril 2016 at 18:13

    jjajaj era por la cita médica, pero yo me levanto a las 7 o 7.30 depende si en España me requieren antes, son 6 horas de diferencia y a veces me contactan temprano y a veces no.

    Si claro, pero aunque el libro no sea enfocado para redactores lo que comentas del pareto es muy válido, extrajiste justo lo que necesitamos los redactores.

    Gracias Roger aunque no lo creas esta fue la primera página que encontré el año pasado sobre redacción, y sin mentirte revisé todos tus post, y tengo varias cosas descargadas. De hecho una de las plantillas que tengo para hacer cálculos por palabra la bajé de tu página y le coloqué fórmulas.

    Fuiste mi primera inspiración junto con Eva San Agustín, con Carmén, con Miguel Florido, con Claudio Inacio, etc y que sin mentirte los conocí gracias a tus post. Siempre una cosa me llevaba a otra.

    Un abrazo desde Colombia

  • Redactor Freelance
    21 abril 2016 at 16:37

    Hola Andrés:

    Me alegro de que te vaya bien como freelance, ¡pero te levantas muy temprano! 😉 

    Este libro que comento no es específico para redactores freelance, pero tiene muchos conceptos que son útiles para cualquier persona que trabaje por su cuenta.

    Puedes ver una selección de los artículos donde doy consejos sobre redacción en este enlace:

    redactorfreelance.com/2014/11/quieres-trabajar-de-redactor-freelance.html

    Saludos,

    Roger

  • Redactor Freelance
    21 abril 2016 at 16:33

    Hola Alba:

    Yo cada vez creo menos en las páginas de trabajo para freelance, web que pagan artículos y otros tipos de intermediarios porque al final los precios acaban por los suelos.

    Mi consejo es siempre: crear una página web propia y un blog para darte visibilidad; mover los contactos profesionales o personales que tengas por anteriores trabajos; realizar búsquedas en Internet de empresas con el perfil que te interesa, ver qué tal se manejan con los contenidos y contactarles para ofrecerles tus servicios en aquellos aspectos en los que pueden mejorar; etc.

    Encontrarás más ideas al respecto en este artículo que publiqué hace un tiempo:

    redactorfreelance.com/2012/08/donde-buscar-clientes-para-trabajar.html

    Saludos,

    Roger

  • Andrés Alcázar
    21 abril 2016 at 13:35

    Q buenos tips Roger…. Tengo q admitir q desde q empece llevo 4 contratos ya ahora trabajo para España, Japón, Colombia y Perú…. Hoy me levante a las 6 am y revisé mis pendientes y las correcciones de mis editores y q satisfacción es saber q todo va por buen camino…. Ahora tengo una cita médica y no le pido permiso a nadie se q es lo q debo cumplir y punto.

    Snifff tengo q admitir q llegue a este punto porq me quede sin trabajo creo q no fui tan valiente para dejar uno…

    Voy a replantearme el tema del pareto q aplicaba en mi trabajo de oficina pero en mi casa no ejejej

    Gracias por esos comentarios del libro y creo q le das apenas a lo q hacemos, es decir me interesan los concejos sobre redacción y ser freelance no sé cómo montar un negocio mágico por internet jejeje

    Sld

  • Unknown
    21 abril 2016 at 13:34

    Me parece genial la idea y de hecho llevo tiempo intentándolo. El problema es que es dificil encontrar clientes. Hay webs dónde se oferta empleo a autónomos pero tienes que pagar ya sólo para poder inscribirte en ciertas ofertas. Lo más dificil es empezar, pero cómo?

  • Redactor Freelance
    21 abril 2016 at 10:31

    Hola Virginia:

    me alegro de que te guste.

    La verdad es que este libro fue una gran inspiración para animarme a dar el salto al mundo freelance ya hace diez años. Desde entonces no he dejado de releerlo y siempre aprendo cosas nuevas.

    Saludos,

    Roger

  • Unknown
    21 abril 2016 at 09:42

    Estupendo artículo Roger, sobre todo por la parte que hace hincapié en lo difícil que es renunciar en la época actual a una trabajo "que no te llena" y dar el salto para dedicarte a lo tuyo, a lo que te apasiona de verdad: estar rodeada de palabras. Un aliciente para los freelance que nos dedicamos a este magnífico mundo de la escritura. Gracias.

Añade un comentario