10 ideas para ser más productivo trabajando desde casa

Desde principios del 2020, muchas personas han comenzado a trabajar desde casa. Si eres nuevo en este estilo de vida, ya sea debido al coronavirus o porque has encontrado un trabajo en remoto, puede que hayas descubierto que necesitas cambiar tus hábitos y rutinas para que el trabajo en casa sea un éxito. Aquí tienes unos cuantos consejos que te pueden ser útiles.

Sabemos que trabajar desde casa no es tan fácil como muchos lo imaginan. Cada uno de nosotros se enfrenta a desafíos únicos, tenemos diferentes personalidades, estilos de vida y claro, distintos trabajos. Pero muchos de los problemas que solemos enfrentar trabajando en remoto, ya sea como freelance o como teletrabajadores, son los mismos. Lo principal es definir cuándo vamos a trabajar, dónde y cómo crear límites entre el trabajo y la vida personal. 

Hemos preparado algunos consejos para llevar una vida de trabajo remoto mejor y más productiva, basados en nuestra experiencia y lo que hemos aprendido de los demás.

1. Organiza tus horarios

Establece tu horario de trabajo y cúmplelo la mayor parte del tiempo. Tener claro cuándo trabajar y cuándo terminar el día ayuda a mantener el equilibrio entre la vida laboral y personal.

Dicho esto, uno de los mejores beneficios del trabajo remoto es la flexibilidad, cuando el trabajo lo permite. A veces necesitas alargar tu día o comenzar temprano para adaptarte a la zona horaria de otra persona. Cuando lo hagas, asegúrate de terminar más temprano de lo habitual o dormir un poco más a la mañana siguiente para compensarlo.

2. Crea una rutina

Decidir que estarás en tu oficina y empezarás a trabajar en un horario determinado es una cosa, pero crear una rutina con todo lo que tienes que hacer y seguirla es otra. 

Crear una rutina puede ser una decisión más poderosa cuando tienes una libreta personalizada para ayudarte a organizar todas tus tareas y así comenzar bien el día. ¿Qué mejor que empezar el día ya sabiendo todo lo que tenemos que hacer? Y así saber el tiempo que tenemos entre un compromiso y otro, además de nuestro tiempo libre antes y después de trabajar. Quizás incluso te dé tiempo de sacar el perro a pasear, o de hacer deporte. 

Si logramos organizarnos y establecer límites en nuestra agenda, podemos tener un día más tranquilo y empezarlo bien.

3. Crea reglas para tu espacio de trabajo 

Aunque estemos trabajando desde casa, es importante que tanto nosotros como los demás respetemos este espacio. Si tienes niños que están asistiendo a clases desde casa o que regresan del colegio mientras tú aún estás trabajando, ellos necesitan reglas claras sobre lo que pueden y no pueden hacer durante ese tiempo así como evitar entrar en este espacio. Si compartes el espacio con otro adulto que está trabajando en remoto, es posible llegar a un acuerdo para tener momentos de descanso, así como horarios para hacer llamadas y reuniones. 

Además, el hecho de que estés en casa y puedas permitir que las personas del servicio entren o que cuiden de las mascotas no significa que otros miembros de tu familia piensen que pueden hacer lo mismo. Si tienes un horario más flexible y puedes permitirte recibir visitas de vez en cuando está bien, pero si no, es imprescindible que te impongas ciertas reglas para no ver tu productividad afectada.

4. Haz pequeños descansos

Es imposible que alguien trabaje sin parar. Todos necesitamos un descanso para mantener nuestra mente sana y seguir teniendo altos niveles de productividad y calidad del trabajo.

Priorizar el cuidado personal y la productividad nos mantendrá más saludables y felices. De manera contraria a la intuición, para algunos, al menos, es casi seguro que mejorará su productividad a largo plazo, si se hace correctamente.

Actualmente hay diferentes aplicaciones para Mac y Windows que nos ayudan a controlar nuestro horario de descanso, y si no quieres descargar una aplicación más, puedes simplemente programar una alarma en tu móvil para controlar tu tiempo libre. Y claro, haz los descansos en su totalidad. No vuelvas a trabajar antes que se acabe el tiempo, especialmente durante la hora de comer.

5. Cambia de ambiente

Los trabajadores remotos pueden trabajar desde diferentes espacios. Ahora que avanza la vacunación y tenemos la posibilidad de salir de casa, es posible trabajar desde cafés, bibliotecas y espacios de trabajo conjunto para romper la monotonía de estar en casa. 

Pero si tienes tu espacio de trabajo dentro mismo de casa, ¿por qué no salir a dar un paseo y mover el cuerpo? Además, el aire fresco y la luz natural hace bien a todos. Lo ideal es salir al aire libre durante al menos un rato antes, durante y después de tus horas de trabajo. 

Este mismo consejo se aplica también a las personas que trabajan en entornos de oficina tradicionales. Sal del edificio al menos una vez al día.

6. No dudes en pedir lo que necesitas

Si estás trabajando para una empresa que apoya el trabajo en remoto, deberías solicitarle el equipo que necesitas para hacer tus funciones tan pronto como empieces a trabajar desde casa, o dentro de unos días de darte cuenta de que necesitas algo nuevo para ayudarte en tu espacio de trabajo, y hacerlo de la forma más cómoda posible. Si estás trabajando en remoto por tan solo un período corto y dentro de poco regresarás a la oficina, pide lo que necesites, pero estate dispuesto a hacer concesiones aceptables.

Estos elementos pueden incluir el monitor, el teclado, el ratón, la silla, el software adecuados, etc. Las organizaciones que están acostumbradas a tener empleados en remoto, a menudo tienen un presupuesto para equipos de oficina en casa. Pregunta qué incluye y con qué frecuencia se renueva. Tampoco está de más preguntar si existe un contrato de préstamo o quién pagará el envío de devolución o la eliminación de equipos obsoletos. 

7. No seas demasiado duro contigo mismo o con tus compañeros de trabajo

Muchos de los trabajadores en remoto tienen fama de ser extremadamente disciplinados una vez que se necesita un enfoque serio para hacer cualquier trabajo de tiempo completo desde un espacio diferente al típico entorno laboral. Pero también pasa que tenemos días o momentos en los cuales estamos distraídos o dejamos que se nos desvíe la atención de vez en cuando.

Si mientras estás trabajando te distraes por un momento investigando alquileres de casas de vacaciones, no te reprendas. En cambio, pregúntate si tus compañeros de trabajo hacen lo mismo. Si la respuesta es sí, déjate llevar un rato y vuelve a trabajar un poco más tarde. Recuerda que debes equilibrar la productividad con el cuidado personal; de lo contrario, corres el riesgo de quemarte.

Durante el último año, es normal que muchas personas estén más estresadas y sufriendo ansiedad, sean ellas o nosotros mismo, nuestros compañeros de trabajo, clientes o jefes.

La pandemia ha cambiado completamente nuestras vidas y no sabemos por lo que están pasando otras personas en sus casas y en el trabajo. 

8. La comunicación es muy importante 

Trabajar de forma remota requiere que todos nos comuniquemos en exceso.

Comunícate con todos los que necesitan conocer tu horario y disponibilidad con frecuencia, o puedes crear un calendario laboral en Google, y bloquear algunos horarios para que nadie pueda invitarte a reuniones. Pero en ningún momento asumas que tus compañeros de trabajo o clientes lo recordarán. 

En el caso de que tengas tareas compartidas con otras personas, puedes usar diferentes herramientas de colaboración para que tú y tus compañeros veáis cómo van avanzando los proyectos y así estaréis siempre al tanto de las actualizaciones que vayan surgiendo, y claro, también cuando termine un proyecto o tarea importante. 

Comunicarse en exceso no significa necesariamente que tengas que escribir un ensayo de cinco párrafos para explicar cada uno de tus movimientos, pero sí significa repetirse. Bromea acerca de que ya debes haber mencionado tus próximas vacaciones seis veces y luego vuelve a mencionarlo.

9. Sé positivo

Leer el tono en los mensajes escritos es realmente difícil en entornos totalmente remotos. Cuanto menos tiempo de cara a cara pases con la gente, es más probable que un mensaje intencionalmente conciso pueda parecer de mal genio.

En entornos de trabajo remoto, ¿por qué no mantener la positividad? Pero que siga sonando profesional. Abraza el signo de exclamación, y encuentra tus emojis o gifs favoritos. ¡Los vas a necesitar! 

10. Termina tu día bajando la persiana

Igual que deberías comenzar tu día con una rutina, crea un hábito que señale el final de la jornada laboral, como si bajaras la persiana de tu negocio. Puede ser una actividad como pasear al perro, ir al gimnasio o jugar con los niños. O algo tan simple como apagar el ordenador y poner tu canción favorita. Elijas lo que elijas, hazlo siempre para marcar el final de tu jornada laboral y ayudarte a desconectar mentalmente.

Comentarios

  • Todavía no hay valoraciones.
  • Añade un comentario