Gratis no trabajo: ¡únete a la campaña contra la precariedad de periodistas y redactores!

Después de años de precariedad laboral, tarifas miserables, pruebas de redacción sin cobrar, clientes que no pagan lo acordado y otros abusos, los periodistas y redactores han estallado con la campaña #GratisNoTrabajo. ¡Si tú tampoco aguantas más, únete ahora!

Este fin de semana ha estallado un debate en Twitter sobre las condiciones laborales de los redactores. La polémica surgió tras la denuncia en Linkedin de Azahara Cano, una periodista que recibió una oferta de trabajo que consideró indignante.

Júzgalo tú mismo a ver qué piensas:

La empresa le ofrecía escribir artículos de 800 caracteres a 0,75 € por pieza para publicar en páginas web. Tenía que escribir 400 artículos al mes para alcanzar un mínimo de 300€, de lo contrario no le pagarían hasta el mes siguiente. Los artículos debían ser inéditos, de calidad, con criterios SEO, etc.

En lugar de callarse, la joven periodista compartió la oferta en LibkedIn, donde recibió los apoyos de varias decenas de compañeros indignados. Hasta así, todo normal.

Sin embargo, en lugar de callar o disculparse, que hubiese sido lo más inteligente en este caso, la empresa Novo Distribuciones que originó la polémica con su lamentable oferta de artículos a 0,75 céntimos prefirió anunciar que estudiaba acciones legales contra Azahara Cano, la periodista que inició la protesta. Lo cierto es que los responsables de esta empresa hubieran hecho mejor en contratar a un relaciones públicas o una agencia especializada en comunicación de crisis, en lugar de gastar en abogados el dinero que no están dispuestos a pagar a sus redactores.

Esto no hizo más que viralizar el asunto, añadiendo más leña al fuego en lugar de apagarlo. La Asociación de la Prensa de Madrid se sumó a la protesta en Twitter creando el hashtag #gratisnotrabajo, que se ha convertido en trending topic de Twitter durante el fin de semana.

Captura twitter gratis no trabajo

La protesta se ha extendido a las redes sociales, donde ya cuenta con una página de Facebook que tiene más de 3.000 fans y un perfil de Twitter que se acerca a los 1.000 seguidores. En estos espacios, los profesionales que apoyan la campaña comparten las últimas novedades de la polémica y reflexionan sobre la degradación de la práctica del periodismo en España.

Incluso periodistas reconocidos han compartido y apoyado la campaña, como por ejemplo María Escario de TVE o Julia Otero de Onda Cero, entre otros. La noticia también ha aparecido en diarios como El Mundo o el gratuito 20 Minutos.

Captura gratisnotrabajo 20 minutos

Aunque algunos de los periodistas que se han sumado a la campaña «Gratis no trabajo» deberían fijarse más en lo que pasa en su propio medio: cuántos becarios tienen, qué les pagan, cuánto y cómo cobran los colaboradores externos, quién cubre las ediciones digitales, los convenios que se aplican, categorías, etc. Muchos se llevarían una sorpresa. Pregunten, pregunten…

El problema del #GratisNoTrabajo viene de antiguo

Si eres seguidor de este blog, seguramente la polémica oferta que ha originado la campaña #GratisNoTrabajo no te sorprenderá. Desde 2009 estamos denunciando ofertas de trabajo abusivas para redactores que son iguales o peores que ésta: escribir artículos por 0,80 €, posts de prueba sin cobrar, periodistas a 6 € la hora, 10 artículos al día por 100 € al mes, etc.

Muchos de vosotros os habéis sumado a estas denuncias, que no hacen más que corroborar que nuestra profesión está tocando fondo desde hace tiempo.

 Trabajo en el mundo del periodismo desde hace casi 15 años y he visto cómo las condiciones laborales del sector empeoraban progresivamente

Yo mismo empecé a trabajar sin cobrar a los 17 años en un diario local, luego empalmé una sucesión de becas mal remuneradas y no vi mi primer contrato hasta los veintitantos años. Después aún tuve que sufrir horas extras que no se cobraban, dietas que pagaba de mi bolsillo e incluso tener que reclamar el finiquito de un despido en los tribunales ya que la empresa consideró «que no me lo merecía». Mis compañeros de estudios no estaban mejor que yo, muchos no cobraron por sus becas e incluso algunos tenían que comprarse las cintas de vídeo para trabajar en una televisión local cuyo nombre no quiero acordarme.

Ahora me gano la vida razonablemente bien con mi trabajo como redactor freelance en régimen de autónomo, pero veo que la irrupción de Internet no ha hecho más que empeorar las cosas al rebajar las exigencias para trabajar como periodista o redactor. De ahí esas ofertas vergonzosas que proliferan en la Red: buscad «redactor» en cualquier bolsa de trabajo y os moriréis de risa si antes no os echáis a llorar.

No es un problema solo de periodistas y redactores

La moda de buscar gente que trabaje gratis o por un precio misérrimo se está extendiendo fuera de ámbitos como la redacción freelance y amenaza con convertirse en una práctica generalizada en todos los sectores. El último caso ha sido esta «oferta de empleo» publicada hace poco:

Este nuevo caso de abuso ha sido recogido por el diario Que.es en un artículo en el que han tenido la amabilidad de citarme; aunque si llego a ver el anuncio antes de hablar con la periodista que me contactó, ¡mis declaraciones hubieran sido bastante más duras!

La verdad es que el anuncio no hay por donde cogerlo, porque además de reflejar una cara más dura que el titanio, es totalmente inconsecuente. En primer lugar, pide una dependienta (discriminando automáticamente a los muchísimos hombres perfectamente cualificados para ejercer esta profesión), para cubrir algunos días puntuales como puentes, festivos y fines de semana (otro «beneficio» de la liberalización de los horarios de apertura de los comercios). Pero acto seguido especifica que tendrá que trabajar cada día de 10 a 14h y de 17 a 20:30h durante dos meses… sin cobrar, claro.

Tras los dos meses «de prueba» trabajando por la cara, si los jefes están contentos y la empleada alcanza el nivel de ventas deseado (que vaya a usted a saber cuál será), entonces, y solo entonces, empezarían a pagar. Por día trabajado, claro, no espere que le hagamos un contrato como es debido. Finalmente, añade que «preferiblemente» debe tratarse de una chica española (nueva discriminación a todo el colectivo de inmigrantes de este país).

Como he comentado repetidamente la tendencia a ofrecer «trabajos» no remunerados ya no parece ser algo exclusivo de oficios como los redactores freelance, los músicos y otras profesiones liberales. Según prueba este anuncio, está extendiéndose a todos los rincones del mercado de trabajo. Y de momento con total impunidad, ya que al parecer el máximo riesgo que corren las empresas que realizan este tipo de ofertas es que les critiquen en Internet. Tal vez la campaña #gratisnotrabajo no haya servido de mucho hasta ahora, pero desde luego no podemos dejar de protestar y denunciar estos abusos.

Más ejemplos de ofertas indignantes

Gratis No Trabajo, No Trabajo Gratis, #No Salary… Son muchas las denominaciones bajo las que se han realizado denuncias contra las condiciones laborales precarias que han proliferado en los últimos años. 

Me gustaría decir que estas denuncias han servido para algo, pero me temo que no. La prueba es que muchas empresas siguen ofreciendo trabajo para redactores y otros profesionales de la comunicación con remuneraciones escandalosamente bajas o directamente sin cobrar. Ni siquiera el miedo a dañar la reputación online con este tipo de ofertas parece frenar la moda de ofrecer trabajos que no son basura, sino lo siguiente. Como muestra, estos casos que me han llegado en los últimos meses:

«Lo siento, pero no me vas a vender la moto»

Captura lo siento pero no me vas a vender la motoUn contundente intercambio de mensajes y declaraciones en los medios de comunicación entre la agencia Bloom Estudio y Carlos, un «eterno becario» al que ofrecieron unas prácticas sin cobrar «para hacer currículum». Leer.

«No. Gratis no trabajo. Y punto.»

Captura eva diz
Eva Diz, autora de Diario de una Periodista SEO, opina sobre una oferta que recibió para escribir 200 artículos de 400 palabras a 2 euros la pieza. ¡Los textos tenían que ser de calidad, por supuesto! Leer. 

Institucionalizando el trabajo gratis

Sin embargo, lo más preocupante desde mi punto de vista es que está surgiendo una corriente de opinión que defiende sin complejos las bondades de trabajar gratis. Por un lado están los empresarios, cuyo previsible punto de vista reflejan estos dos artículos:

«Contratos en prácticas y cómo se ordena alfabéticamente»

orden alfabetico
Un empleador se topa con un becario que no sabe ordenar alfabéticamente y decide que «en mi empresa esta es la última persona que va a tener el honor de realizar prácticas.» ¡Pues muy bien, usted se lo pierde! Leer.

«¿Debe cobrar el becario?»

el becario no cobra
«El becario, el contratado en práctica, el novato, bajo la modalidad que sea, ha de ser consciente que su principal remuneración es la formación. Esa que no tiene precio.» Y yo me pregunto: ¿llevar cafés a los jefes o ir a hacer recados también es formación? Leer.

Pero lo peor es que cada vez más estudiantes y licenciados jóvenes, no solo del sector de la comunicación, han empezado a aceptar que trabajar gratis es inevitable para tener alguna posibilidad de acceder a un empleo de «verdad». Aquí van un par de ejemplos:

«Prefiero trabajar gratis a estar parada»

necesito la experiencia
«El despertador de Diana suena a primera hora. Se prepara para una larga jornada de trabajo pero, a diferencia de los demás, no cobrará por sus esfuerzos. Al menos, en dinero.» Leer

«Lo más triste es que no te quieren ni para hacer prácticas gratis»

no te quieren ni trabajando gratis
Cuatro estudiantes debaten sobre su sombrío futuro cuando terminen la carrera, con perlas como «no me importaría trabajar gratis como parte de mi formación. Pero ni así podemos». Leer.

Por mal que esté la situación, sigo pensando que trabajar gratis no es la solución, porque va camino de convertirse en una especie de «impuesto revolucionario» para acceder al mercado laboral.

Cada vez más empresas ven en las necesidades de los jóvenes una forma de conseguir empleados sin cobrar, hasta el punto de que organizaciones como Facua ya incluyen el trabajo gratis en su lista de estafas comunes en las ofertas de empleo. 

Además, tener a una persona trabajando sin contrato y sin cobertura de la Seguridad Social supone como mínimo media docena de infracciones de la normativa laboral, sancionables con multas de hasta 7.000 euros según explica este artículo. ¿Entonces, por qué no se persigue con más dureza estas situaciones y de paso eso ayudaría a reducir el elevado nivel de desempleo actual?

Para terminar, si a pesar de todas estas lecturas todavía te estás planteando la posibilidad de trabajar gratis para otros, tal vez este artículo de Enrique Serrano te haga cambiar de idea:

«Acerca de trabajar por poco o nada»

no te justifiques por cobrar
Una reflexión sobre los peligros de trabajar gratis, incluso cuando se trata de hacerle un favor a un amigo o conocido, y técnicas para huir de la trampa de no cobrar. Leer

¿Crees que trabajar gratis como freelance es aceptable? ¿En qué casos estarías dipuesto a hacerlo?

Comentarios

  • SANDRA
    19 junio 2018 at 09:52

    Hola acabo de vivir una de esas experiencias que no te puedes creer. Me escriben de Toppercan y me piden que haga una prueba, obviamente gratis, dejando un comentario en su foro. Les contesto enviándoles mi CV con links a algunos de los 19 premios literarios que he ganado y a varios artículos de animales que he escrito y me contestan que mis artículos están realmente bien, pero que si leí lo de la prueba. Les vuelvo a responder, esta vez explicándoles que tanto ellos como yo, estamos en esto para ganar dinero, por lo que no trabajo gratis. Y me responden: Suerte!! Les envié el enlace a este artículo y tuvieron el MORRO de responderme que comprendían que yo pensase así, pero que no tenía ni idea! Aún sigo flipando y me pregunto cómo se puede hacer para que otros escritores no tengan que pasar por esto!!!!

  • Esther Campusano
    4 junio 2014 at 08:05

    Esto es fuerte: findablogger.net/396102/novedad-redactor-por-la-voluntad

  • Voz en off
    15 septiembre 2013 at 16:43

    La verdad es que esta gente tiene mucha cara. Pero además de a los empresarios habría que educar a los lectores. Hay que pagar por los contenidos de calidad.

  • Unknown
    10 septiembre 2013 at 23:47

    Como veis todo sigue igual un tiempo después

    cristinahontanillaportfolio.wordpress.com/2013/09/10/gratisnotrabajo-siendo-una-periodista-todoterreno-y-tu-companero/

  • periodico paraguay
    25 septiembre 2012 at 19:29

    Muy buenooo!!!

  • olguiña
    13 diciembre 2011 at 21:46

    Mariska dice:
    Aunque no estudié periodismo (sorry por el intrusismo pero he de ganarmea vida) colaboro GRATIS en uns tv local y escribo artículos variopintos en blogs de toda clase y condición: mascotas, derecho, creación literaria… Apenas me llega para subsistir y he de realizar trabajos complementarios en galerías de arte catalogando y montando expos, clases particulares… Una ruina. Toda mi solidaridad. Tb tengo contactos en teatro x dinero… Casi todos andamos igual. Ànimo

  • Anónimo
    13 diciembre 2011 at 13:57

    Hasta ahora no me había pronunciado al respecto a pesar de que soy una de las nuevas generaciones de bloggers que nos hemos visto forzados a trabajar por cantidades irrisorias.

    El¡Basta ya! se debería oír alto, desde luego, aunque recientemente he encontrado una alternativa llamada Myntmarket que he compartido en mi sitio web, una basura en comparación con esta página del redactor freelance pero que me sirve como bitácora mientras voy abriéndome paso en este mundo.

    En dicho artículo se explica mi primera experiencia con esta web en la que se ofrecen servicios de redactor o en la que se pueden encontrar recursos utilizados por redactores como son los optimizadores o las listas de usuarios twitter. Me reservo mi controvertida opinión pero espero que os sea útil.

    Un saludiño.

    ( vivamoscomobloggers.blogspot.com/2011/12/empleo-blogger-myntmarket.html)

  • Anónimo
    8 diciembre 2011 at 12:46

    He vivido esto en primera persona varias veces, intentando buscarme la vida como freelance cuando he estado sin trabajo, pero es imposible, cuando veo estas ofertas me pregunto ¿Y he estado cinco años en la universidad para esto? (y aunque no hubiese ido a la universidad,igual). Un día en la web trabajofreelance (que ya ni uso por lo mismo) me respondieron a mi propuesta por un trabajo que ofrecían diciéndome si no había visto las demás propuestas puesto que yo estaba estableciendo unos precios caros (las otras propuestas eran algo así como a 1 euro un artículo de 800 palabras),y le respondí que sí las había visto, pero que mi trabajo y mi esfuerzo merecían algo más de dinero… por supuesto ni me respondieron

  • Blackdos
    6 diciembre 2011 at 21:26

    Por desgracia, eso no solo ocurre en el sector del periodismo, también pasa en todos los sectores de profesionales.

    Un saludo y animo de un asesor.

  • fotógrafo en el mismo caso
    6 diciembre 2011 at 18:00

    Bueno, os voy a contar mi experiencia como fotógrafo (que, como veréis enseguida, tiene mucho que ver con lo que se cuenta aquí).

    En 2006 tuve la alegría de ver cómo un banco de imágenes de Andalucía, donde vivo, me aceptase como fotógrafo. Por aquel entonces, los precios que se abonaban eran muy dignos (alguna portada me reportó hasta 180 euros).

    Sin embargo, todo cambió rápidamente: aparecieron los "microstocks", que vendían las mismas fotos (no otras) de los mismos fotógrafos (no de otros) por un puñado de céntimos… Estamos hablando de imágenes de enorme calidad, y cuyos clientes se suscribián por un cantidad fija mensual.

    Desde entonces, la cosa no ha hecho más que empeorar… Mi antigua "casa" se ha convertido en un microstock más, y suerte tengo de que, gracias a que mi porcentaje de fotos aceptadas es elevada, aún puedo poner un "precio mínimo" a mis fotos… lo cual, claro, explica que cada día venda menos.

    Por eso decidí abandonar el sector y buscar otros caminos, autogestionados por supuesto. Y es que la red tiene eso: si, por un lado, deprecia muchos productos, por el otro permite que cualquier cree su propia plataforma y, con suerte y esfuerzo, encuentre su lugar bajo el sol.

    Se acabaron los buenos tiempos…

  • Anónimo
    6 diciembre 2011 at 13:00

    Es trístisimo ver lo infravaloradas que están las carreras de letras en general y algunas en particular. A mi me gustáría dar el salto como redactora freelance pero con noticias como estas… uno se ve en una encrucijada porque para empezar todo el mundo tiene ser humilde pero con este panorama cada vez es más difusa la división entre humildad y humillación. Triste, triste.

  • Mike Medianoche
    5 diciembre 2011 at 12:46

    Es tristísimo… Y da igual que sea para redactor, locutor o lo que corresponda; actualmente yo colaboro en una radio con una sección de actualidad televisiva y no me pagan ni la gasolina. Por no hablar del tema de los blogs de medios, que también es mi caso; ser líder de los blogs de un conocido portal y que la única recompensa sea una revista al mes y porque lloramos pidiendo algún tipo de pago. Un drama.

  • Javi de Ríos
    5 diciembre 2011 at 11:00

    Es bastante desesperante, Roger. Yo llevo muchos años como redactor web freelance, y debo reconocer que me llegan ofertas dignas. Pero ojo, siempre por el boca a boca de gente que sabe cómo trabajo, y hoy en día cómo me muevo por redes sociales. Pero en bolsas de trabajo, por las que sólo he pasado en las épocas flojas a ver qué había, nunca he encontrado más que timos de la estampita. Lo qué sí tengo que defender pese a todo es la Red. Comprendo que para algunos haya podido suponer un menoscabo, pero para mí ha sido una oportunidad.

  • Anónimo
    5 diciembre 2011 at 10:21

    Hola Jacobo:

    gracias por avisarme, ¡tienes razón!

    Malditas prisas…

    Ya lo he corregido en el artículo.

    Saludos,

    Roger

  • Jacobo Feijóo
    5 diciembre 2011 at 10:06

    Has cometido una errata. Habla de 800 caracteres, no palabras.

    Sigue siendo como para ahorcarlos, pero no es igual.

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