Crea contenido para tu newsletter que sea irresistible para tus suscriptores
¿Estás harto de pelear con las técnicas de SEO para arañar unas visitas más a tu web o blog, o a las páginas de tus clientes? Pues esto te interesa: con una newsletter de calidad, puedes conseguir un flujo de visitas creciente hacia tu página, además de construir una comunidad de seguidores más estable y valiosa que las fugaces visitas de los que te encuentran por casualidad en Internet. ¿No te lo crees? Prueba estos consejos y verás.
Si alguna vez te pones a analizar las estadísticas de tu web o blog, el panorama resulta bastante desalentador: lo normal es que la mayoría de la gente que entra en tu página “rebote” (se van a los pocos segundos), la inmensa mayoría nunca vuelve a visitar tu sitio y el porcentaje de los que comparten o comentan tus contenidos es ridículamente reducido.
No es que lo estés haciendo peor que los demás: simplemente, Internet es así. Existen millones de páginas compitiendo por captar la atención de los usuarios, que es escasa y fugaz. Aunque apliques los trucos de SEO más sofisticados del mundo, difícilmente lograrás que los resultados de tráfico que obtienes mejoren significativamente. Puedes conseguir más visitas, pero la mayoría seguirán siendo básicamente esporádicas y poco participativas.
Entonces… ¿apaga y vámonos? No tires la toalla: existen maneras de conseguir un tráfico de mayor calidad y fidelidad. Y una de las más eficaces es crear un boletín o newsletter. ¡Pero no vale cualquier cosa! No basta con enviar un mensaje diciendo “Mira el último artículo de mi blog”. Para conseguir que la gente se suscriba a tu newsletter, abra los boletines que envías, pulse en los contenidos y no se dé de baja a las primeras de cambio, tienes que esforzarte en crear contenido para tu newsletter que sea irresistible para los suscriptores.
Como redactor freelance, tienes ventaja porque ya sabes escribir para Internet. Sin embargo, en MDirector llevamos una década gestionando campañas de e-mail marketing para miles de clientes en 20 países. Sabemos qué funciona y qué no, y nos gustaría compartir algunos consejos contigo, que puedes aplicar a tus propios newsletter o a los de tus clientes.
Empieza por un buen asunto
Puedes usar tu talento de redactor para escribir un newsletter fantástico, lleno de emoción, suspense, datos de interés y hasta un poco de humor. También te puedes trabajar las imágenes o incluso incrustar un vídeo en el que abras tu corazón a los suscriptores.
Pero todo esto no servirá de nada si nadie abre tu newsletter, ¿verdad? Y para que alguien abra tu boletín, el asunto debe engancharle, despertar su interés y empujarle a abrir tu mensaje y seguir leyendo.
Por ejemplo: ¿cuál de estos mensajes abrirías primero?
Asunto: Novedades fiscales para la Renta 2017
Asunto: ¿Quieres pagar menos impuestos este año?
Está claro que pagar menos impuestos resulta más tentador que conocer las novedades fiscales de la próxima campaña de la renta, aunque el contenido del mensaje sea el mismo…
Se ha escrito mucho sobre cómo debe ser un buen asunto para una campaña de e-mail marketing: largo, corto, divertido, misterioso, lleno de promesas… Nosotros no te diremos cuál funciona mejor, porque depende de factores como la empresa, la campaña y el mensaje.
Pero sí te recomendamos tres cosas:
- No escribas un asunto aburrido, del tipo “Boletín de septiembre”.
- Personaliza el asunto incluyendo el nombre del destinatario.
- Haz pruebas A/B para probar qué asunto funciona mejor en una campaña.
Ofrece contenido de valor
Después de un buen asunto, el contenido debe mantener el mismo nivel de calidad o resultará decepcionante cuando el receptor abra tu mensaje y empiece a leer. Y si decepcionas a tu suscriptor, lo más probable es que pulse en “Baja” y se desuscriba de tu lista de correo.
Es lo mismo que cuando escribes un artículo para tu blog o el de un cliente: como redactor de contenidos, sabes que es importante elegir un buen título, pero el contenido debe ser igual de interesante o estarás haciendo una “promesa” en el título que luego tu artículo no cumple.
Existen muchos tipos de contenidos que puedes incluir en tu boletín. Por ejemplo:
Destaca el último artículo de tu blog, un nuevo producto o servicio, etc.- Resume las últimas novedades de tu página web o tienda online.
- Anuncia una promoción u oferta especial para tus suscriptores.
- Recomienda contenidos de otros (lo que se llama curación de contenidos).
Elige la fórmula que prefieras, pero procura que el contenido sea interesante, aporte valor al usuario y, sobre todo, esté escrito de forma amena y sin faltas. ¿El mejor truco para que no te salga un “rollo” de boletín? Procura hablar al lector como si lo tuvieras delante, en persona.
Muestra tu personalidad
Cada usuario recibe una media de 7 newsletters al día en cada una de sus cuentas de correo (y la mayoría solemos tener al menos una dirección personal y otra de trabajo). Esto son casi 50 boletines a la semana, 200 al mes, 2.400 al año… ¿Cómo destacar entre tanta competencia?
Una buena manera de lograrlo es darle una personalidad propia a tu boletín, que lo haga inmediatamente reconocible y te diferencie de los demás. No intentes imitar a otras empresas (aprende de lo que hacen bien, ¡pero no copies!), sino que busca la manera de reflejar quién eres y qué ofreces a tus seguidores en cada boletín que envíes.
Tampoco conviene pasarse de la ralla contándole tu vida a tus suscriptores si no tiene nada que ver con el motivo por el cual se suscribieron a tu correo. Pero debes esforzarte por mostrar que detrás de ese boletín, rodeado por muchos otros mensajes en la bandeja de entrada, estás tú.
Algunas ideas para mostrar tu personalidad:
- Empieza por saludar a tus suscriptores (“¡Hola, María!”).
- Usa un tono amistoso y conversacional, como hemos dicho antes.
- Emplea el humor en dosis adecuadas, emoticonos, etc.
- Plantea preguntas a los lectores de tu boletín.
- Cuenta experiencias personales, ofrece consejos.
- No te pongas a “vender” desde la primera línea.
A ver: si trabajas como redactor web para empresas o tiendas online, sabrás que vender es importante, sobre todo cuando escribes para los boletines de tus clientes. Pero hay muchas formas de hacerlo. Y decir “Compra, compra, compra” desde la primera línea seguramente no es lo mejor si quieres despertar el interés de los lectores del newsletter.
Usa un diseño que entre por la vista
Es importante diseñar tu boletín de forma que resulte agradable a la vista y a la lectura. Por ejemplo ponerle un título, titulillos para separar las diferentes partes, añadir algunas imágenes o incluso algún vídeo breve… La variedad funciona mejor que un mensaje de texto plano. En este sentido, usar una plantilla de e-mail marketing prediseñada te ahorrará mucho tiempo.
Aunque también debes tener en cuenta que la mayoría de los programas de correo bloquean por defecto los contenidos multimedia, que solo se pueden ver si el usuario lo autoriza. De modo que lo más importante debe estar siempre en el texto, que debe funcionar por sí solo en caso de que el usuario no llegue a ver las imágenes y otros materiales que la acompañan. Por tanto, como buen copywriter, esfuérzate por escribir un texto que sea inolvidable.
Importante: olvídate de los adjuntos, han pasado a la historia. Con la alarma que existe actualmente respecto a los virus ocultados en ficheros de PDF, zip, e incluso imágenes, lo más probable es que si añades un adjunto a tu correo, el usuario mande el mensaje directamente a la papelera, sin ni siquiera leerlo. Si quieres adjuntar algún material, cuélgalo en tu página, en Dropbox o en Google Drive y añade un enlace para que los suscriptores puedan consultarlo.
Incluye siempre una llamada a la acción
Por último, no olvides incluir en tu boletín, siempre y de manera claramente visible, una llamada a la acción. ¿Qué es? Simplemente, una frase o botón que indique al lector qué quieres que haga a continuación: pulsar para visitar tu página, descargar un material, solicitar información, reenviar tu boletín a sus contactos, etc. Esto vale para todos los contenidos que escribas como redactor para páginas web, artículos para blog, páginas de aterrizaje, etc.
Parece una tontería, pero la mayoría de los newsletters fracasan (aparte de por un mal asunto) debido a uno de estos dos motivos:
- No incluyen una llamada a la acción clara: el usuario termina de leer tu boletín y no hace nada más. Cierra tu mensaje, lo manda a la papelera y no se acuerda de ti hasta el próximo boletín.
- Incluyen demasiadas llamadas a la acción: lee esto, mira este vídeo, visita mi web, etc. Ante tantas opciones, el usuario no sabe qué hacer y al final no hace nada de lo que le sugieres.
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